En el ‘espacio’ naranja se alinean los ‘planetas’

Dicen los científicos que cuando se alinean los planetas en el universo, se producen cambios en los campos electromagnéticos y energéticos que pueden afectar el comportamiento y estado emocional de las personas. Y cuando en el ‘espacio’ político dos personajes empatan o se alinean en la misma dirección, no solamente los favorece, sino que puede producir un movimiento positivo o negativo, dependiendo de la alineación de los otros interlocutores.

Dentro de ese ‘espacio’ político mexicano nos podemos imaginar al presidente de Movimiento Ciudadano (MC), Dante Delgado, como uno de esos personajes que anda en busca de esa ‘estrella’ para alinearse a ella y buscar de manera independiente -’rascándose por sus propias uñas’ en la elección presidencial- hacer ruido e intentar conseguir lo que es un sueño a millones de años luz de ser realidad.

Sin embargo, a pesar de terquedad de ir por su cuenta -que lo ha confirmado en los últimos días-, lo que parece más bien es que Delgado serviría para ir de comparsa para el oficialismo y parece que está a punto de cumplir con su tozudez, teniendo todo listo -cuando los tiempos electorales así lo determinen- sobre quién será alfil para la campaña presidencial.

Las opciones de ‘peso’ de MC están muy limitadas. Pero una de ellas, a pesar de que en el pasado mediato ha dicho que prefiere esperar para el 2030 y cumplir con su compromiso adquirido con el gobierno de Nuevo León, ya ‘sacó’ la cabeza y puso un pie en el pedestal naranja. Lo que habló brevemente el gobernador Samuel García el lunes por la noche en un evento del Instituto de la Juventud dejó volar la imaginación por el ‘espacio’ político. Fue claro al señalar que el siguiente presidente tiene que ser un joven que represente a los 10 millones de nuevos votos que cumplieron 18 años en el último sexenio. “Y fíjense la ironía de la vida, y por eso no quería dejar de venir a este evento, ¿sabían ustedes que la Constitución federal de México prohíbe a los jóvenes participar para la Presidencia?. Hay un artículo que establece que para ser Presidente de la República tienes que tener 35 años o más el día de la elección, por eso llega puro viejillo, ¿pero adivinen que? Tengo 35”. Y tomó vuelo y cuestionó a los jóvenes neoleoneses, con mensaje subliminal a la juventud mexicana: “¿Quieren un presidente joven con nuevas ideas o lo de siempre? ¿Quién va a representar esos jóvenes? ¿Quién va a hablar de energía renovable, de cambio climático, de nearshoring, de infraestructura verde, de carros eléctricos?”. Y hasta ahí quedó. No hubo más pronunciamientos y se fue del recinto del evento. Así o más claro.

Sin embargo, en caso de concretarse la alineación de planetas en el espacio naranja y que Samuel García llegará a posesionarse de la nominación, su presencia en la boleta solo sería para que saliera disparado al espacio infinito con rumbo desconocido, pero si dejando mucho daño a la elección en general con beneficio para el oficialismo. En todo caso, el mejor emparejamiento de estrellas que pudiera suceder para el movimiento naranja -aunque también con efecto negativo para la oposición-, es que desde la galaxia morenista una estrella fugaz -antes posesionada en la Cancillería del ‘espacio’ político- ‘expulsado’ por el ‘dedazo’ de Palacio llegara en busca de una nueva órbita’.

¿Usted, qué opina?

Daniel Rodríguez

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