Los Steelers siguen vivos en la carrera por la postemporada

Mason Rudolph acepta que su mente divagaba en busca de definir su futuro, mientras permanecía como la última opción de Pittsburgh para desempeñarse como quarterback.

“Uno confía en sí mismo como jugador”, dijo Rudolph, contantemente relegado a la suplencia. “Pero en cierto modo yo estaba pensando: ‘¿Voy a dedicarme a los bienes raíces comerciales el año próximo o voy a jugar como quarterback?’”.

El posible cambio de profesión tendrá que esperar. A Rudolph le queda posiblemente algo en su carrera dentro de la NFL y en la irregular campaña de los Steelers.

Rudolph y el receptor George Pickens se conectaron en dos largos envíos de touchdown, y Pittsburgh mantuvo vivas sus esperanzas de playoffs al vencer ayer 34-11 a los Bengals de Cincinnati.

Rudolph fue titular por primera vez en dos años remplazando a Kenny Pickett y Mitch Trubisky. Conectó con Pickens para una anotación de 86 yardas en la segunda jugada ofensiva de Pittsburgh, seguida de una anotación de 66 yardas en el tercer cuarto para que los Steelers (8-7) rompieran una racha de tres derrotas.

Pickens atrapó cuatro pases para 195 yardas. Rudolph completó 17 de 27 pases para 290 yardas y los Steelers tuvieron su mejor actuación ofensiva en años.

“Siento que estuvimos equilibrados y nos combinamos bien”, dijo Rudolph.

Jake Browning lanzó para 335 yardas y un touchdown, pero también lanzó tres intercepciones que los Steelers convirtieron en puntos para que Cincinnati (8-7) terminara su racha de tres victorias consecutivas.

Los 34 puntos de Pittsburgh fueron su mayor cantidad en una victoria desde 2020, silenciando a los críticos de Pickens, quien en varias ocasiones ha sido cuestionado.